El día 19 de julio de 1195 llega a su fin. Alfonso VIII abandona precipitadamente la ciudad, a punto de caer en manos almohades, y se dirige a Toledo (la finca que atraviesa en su huida, llamada de Villadiego, puede ser el origen del famoso dicho "tomar las de Villadiego"). Finalmente, don Diego López de Haro rinde el castillo. El ejército castellano había sido derrotado, dejando miles de muertos en batalla.
Este es el epílogo de la triste historia de lo que pudo ser una bella ciudad. Alarcos comenzaba a levantarse sobre un cerro junto al río Guadiana. Sus murallas y castillo aún en construcción y sus pobladores echando raíces. El origen del desastre, en 1190. Almohades y castellanos en pleno período de consolidación de la paz. El arzobispo de Toledo, con ganas de guerra, penetra en el reino de Jaén y Córdoba y saquea los alrededores de la capital almohade, Sevilla. La respuesta del Califa Ya´qub Al-Mansur no se hizo esperar.
La conquista de Alarcos supone un duro golpe para Castilla. Los almohades vuelven a su antigua capital Qal´at Rabah (Calatrava) y llegan con sus ataques hasta las proximidades de Toledo. 17 años después, la batalla de las Navas de Tolosa revierte definitivamente la situación. Sin embargo, los intentos de repoblación de la zona resultan infructuosos hasta que, en un paraje cercano, llamado Pozuelo de Don Gil, Alfonso X funda la Villa (Ciudad) Real en 1255, como símbolo de su poder en la zona, trasladando allí a sus habitantes.
Hoy día, en las proximidades de Ciudad Real, podemos visitar los restos de lo que fue la ciudad almohade más septentrional, Calatrava la Vieja, y de la antigua ciudad de Alarcos, quedando una bella ermita gótica como mudo testigo de lo que pudo ser...y no fue.
Joder... con el arzobispo de Toledo.
ResponderEliminarOjalá se lo haya cachado un burro pichulon. (sin intenciones de ser grosero..., disculpen todos).
vaya pedazo de leccion de historia. O sea, que cuando Alfonso X decido crear Ciudad Real la hizo fea para que no se la quitaran otra vez, no? que es bromaaaa...
ResponderEliminarYa estamos con lo políticamente correcto. Toda la culpa para el arzobispo. Aquí la culpa la tienen los almohades (bastante fundamentalistas por cierto) que si no se hubieran dedicado a tocar los cojones, a nadie le hubiera ocurrido fundar Ciudad Real y eso que habríamos salido ganando todos
ResponderEliminarY yo que pensaba visitar Ciudad Real para conocer... pero ahora cancelo. Ya lo dijo Raul y hoscoman.
ResponderEliminarNo sois conscientes de los tesoros que encierra esta ciudad. Maravilla entre maravillas. Advierto que hay culipardos entre los lectores de este blog...avisados estáis!
ResponderEliminarEntre los compañeros de la carrera se rumorea que Ciudad Real es una de las ciudades más feas de España (a pesar de su precioso nombre)... y después de haber estado allí ¡me lo creo!!
ResponderEliminarA lo que iba, el dicho de "tomar las de Villadiego" aparece por primera vez en la Celestina. El origen viene de unas calzas que se fabricaban en Villadiego y que parece que eran de muy buena calidad, y que es lo primero que tenías que ponerte para huir... de ahí lo de "tomar las de Villadiego". Por mi curiosidad innata soy aficionado a este tipo de cosas... a que no lo sabiais¿?
Ahora necesitamos que nos cuentes la historia de Valladolid que es más interesante...
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