Hace semanas, Anita Botella se puso muy estricta. Muy rigurosa ella. Señores gays, ¡¡con tanta pluma y tanta Kylie Minogue no me han dejado ustedes dormir en el pasado orgullo!! Han superado en 0,0879 decibelios durante no menos de 1,36 minutos el límite de sonoridad al que acostumbran mis pobres oídos. Ahora no solo les espera el infierno por hacer cosas malas, sino también una multa de aúpa. 35000 eurazos y al contado...¡¡Se van a enterar!!
Hoy, en cambio, está mucho más suave. Más sosegada. Más relajada. Madrid ha superado todos los límites soportables de contaminación que establece la OMS. La ciudad inclumple por goleada la legislación de la Unión Europea. Señores europeos, miren ustedes...necesitamos una moratoria. Ya sabemos que tanta partícula contaminante aumenta la mortalidad y los ingresos hospitalarios de los ciudadanos pero...así es la vida.
¿Incongruencia señora Ana? ¿Doble vara de medir? En absoluto. Lo de los "maricas" es un tema y lo de la contaminación otro completamente diferente. Ambos no se deberían mezclar jamás. Sería como juntar, que sé yo, por ejemplo...peras con manzanas.
esta "señora" no merece que hables de ella en tu blog.
ResponderEliminarcon lo maja que es:-)
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