Pobre Esperanza Aguirre. Ahora muchos le piden una disculpa a Wyoming. Y todo porque le acusó de ser instigador moral de la agresión sufrida por el periodista de telemadrid Hermann Tertsch. Después, han detenido al culpable, el dueño de un bar de copas y claro, ya se saca la conclusión fácil de que no ha existido un motivo ideológico. Pues no. Este blog tiene informaciones contrastadas que indican que Esperanza Aguirre tenía razón y existió un claro móvil ideológico en la agresión. Este periodista tiene, entre sus ideas, la clara convicción de que lo que más entona a altas horas de la madrugada es la ginebra con limón. El dueño del bar de copas, ferviente defensor de las bebidas de ron y un intolerante, terminó la discusión a golpes... Así de fácil. Pero esto no es todo. Más infundios acechan al gobierno de la Comunidad de Madrid. Juan Luis Cebrián, "gran" defensor de la democracia durante la dictadura y consejero delegado de PRISA, ha acusado al consejero de Sanidad Juan José Güemes con uno de los insultos más graves que puede recibir una persona...¡¡¡que usa fijador!!! . Y eso cuando todos sabemos que el flequillo de este hombre es de natural. Menuda infamia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario