¡¡¡QUE SE JODAN!!!

Estoy preocupado por la inseguridad ciudadana en nuestro país. He salido a la calle y me han birlado una pasta. Y todo sin ni siquiera darme cuenta. Los nuevos delincuentes van trajeados, lo que en principio aumenta nuestra confianza hacia ellos, pero en cuanto te das cuenta ¡zas! te quitan la cartera. Ni siquiera utilizan navajas para intimidar. Lo hacen limpiamente. Emplean un peligrosísimo arma que se llama Boletín Oficial del Estado. Y nada de quejarte, porque encima te mandan a unos señores con cascos y porras por si te portas mal. 

Luego hay otra cosa que me llama la atención. Antes, cuando te quitaban el monedero salían corriendo sin más. Ahora no. Ahora se quedan, se ponen a aplaudir al autor del crimen y te explican que, en el fondo, lo están haciendo por tu propio bien. Para que dentro de unos años seas más feliz. Al fin y al cabo, ese dinero te lo ibas a gastar en vicios. Al menos eso consuela, que tu propio ladrón te de ánimos y una palmada en la espalda. Eso sí, no sé si creérmelo porque yo no veo que la cosa mejore. Es más, esa prima de riesgo, a pesar de los pesares, sigue sin inmutarse.

En fin. Trataré de ir con más cuidado a partir de ahora. En cuanto vea a un político encorbatado me cambiaré de acera. Aunque a lo mejor ahí me encontraré con otro que además de robarme me diga...¡¡¡que te jodan!!! Y eso ya sí que no. Al menos si me roban que lo hagan con educación que para eso les hemos pagado entre todos unos buenos colegios privados...