Este fin de semana han vivido un curioso acontecimiento en Ciudad Real. En medio de una finca de Bolaños de Calatrava, así de repente, ha nacido un pequeño y coqueto géiser. Con su chorrito y todo. La oficina de turismo de la provincia ya puede ofertar visitas a este espectáculo de la naturaleza. Y sin necesidad de meterse en un avión durante horas hasta Islandia. Un viaje barato para tiempos de crisis, publicidad turística para esta provincia y fama y dinerito para el dueño de la finca...
Así todos contentos...¿todos?...pues no en mi caso. A mi no me hace ninguna gracia saber que en cualquier momento puedo amanecer dentro del cráter de un volcán. Ahorraría mucho en calefacción, eso sí, pero no sé si el susto me compensaría:-)
¡¡¡Besos y abrazos!!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario